El arsénico
Tras el anuncio del ayuntamiento el pasado día 10 del presente mes, del aumento del nivel de arsénico presente en el agua potable. Convierte el agua del grifo en agua no potable, aunque no nos dice cual es el nivel existente, hay que tomar medidas de prevención ya que puede ser muy perjudicial para la salud. Para ello ha instalado una cisterna en la plaza del ayuntamiento con agua potable a disposición de todos los vecinos y visitantes. Pero echamos en falta las indicaciones que deberíamos tomar en las actividades domesticas diarias con el consumo de este agua.
Es importante saber cual es el nivel actual de arsénico en el agua, ya que dependiendo de ese nivel se puede utilizar para según que tareas e higienes domesticas.
Contaminación por Arsénico en el Agua Potable: Riesgos y Soluciones
El arsénico es un metaloide que se encuentra de forma natural en la corteza terrestre y puede contaminar el agua subterránea debido a la erosión de minerales o por actividades humanas como la minería, el uso de pesticidas y el vertido de residuos industriales.
Cuando los niveles de arsénico en el agua potable superan los límites permitidos, como ha informado recientemente el ayuntamiento, el agua deja de ser apta para el consumo humano, lo que plantea una serie de preocupaciones sobre la salud y el uso cotidiano del agua en el hogar.
¿Cuál es el límite permitido de arsénico en el agua potable?
Según la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud (OMS), el límite máximo de arsénico en el agua potable es de 10 microgramos por litro (10 µg/L). Sin embargo, en algunos países, especialmente aquellos con problemas históricos de contaminación por arsénico, se establecen límites aún más estrictos.
Cuando estos valores se superan, el agua no debe consumirse hasta que se reduzcan los niveles de arsénico a valores seguros.
Efectos del arsénico en la salud humana
El arsénico puede causar efectos perjudiciales en la salud, especialmente cuando la exposición es prolongada. Dependiendo de la cantidad ingerida y el tiempo de exposición, los efectos pueden ser agudos o crónicos:
Efectos agudos (exposición a corto plazo, dosis altas)
Si se consume agua con una concentración muy elevada de arsénico en un corto período de tiempo, pueden aparecer síntomas como:
- Náuseas y vómitos
- Dolor abdominal intenso
- Diarrea
- Dolor de cabeza
- Confusión mental
- En casos extremos, puede provocar un fallo multiorgánico y la muerte
Efectos crónicos (exposición prolongada a dosis moderadas o bajas)
El principal riesgo del arsénico está en el consumo continuado de agua contaminada, lo que puede provocar problemas de salud graves a largo plazo:
- Cáncer: Se ha demostrado que el arsénico aumenta el riesgo de cáncer de piel, pulmón, vejiga, riñón y próstata.
- Problemas cardiovasculares: Puede provocar hipertensión, enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares.
- Lesiones en la piel: Aparición de manchas oscuras en la piel (hiperpigmentación) y endurecimiento en algunas zonas (queratosis).
- Trastornos neurológicos: Problemas de memoria, dificultades cognitivas y neuropatía periférica.
- Daño hepático y renal: Afecta la función del hígado y los riñones, dificultando la eliminación de toxinas del organismo.
- Problemas en el desarrollo infantil: En niños, el arsénico puede afectar el crecimiento, el desarrollo neurológico y la función inmune.
¿Podemos seguir utilizando el agua para lavar alimentos, cocinar y ducharnos?
Una de las principales preocupaciones es saber si el agua contaminada con arsénico sigue siendo segura para otras actividades diarias. La respuesta varía dependiendo de la actividad:
1. ¿Se puede lavar frutas y verduras con esta agua?
No es recomendable.
El arsénico no se evapora ni se elimina fácilmente con el lavado, por lo que si lavas frutas y verduras con agua contaminada, podrías dejar rastros de arsénico en la superficie y consumirlo al ingerir los alimentos.
Alternativa:
- Lava frutas y verduras con agua embotellada o previamente filtrada.
- Si no tienes acceso a otra agua, pela las frutas y verduras antes de consumirlas para reducir el riesgo.
2. ¿Se puede cocinar con esta agua?
No es seguro.
El arsénico no desaparece al hervir el agua, sino que puede incluso concentrarse más a medida que el agua se evapora. Esto significa que cocinar con agua contaminada puede aumentar la cantidad de arsénico en los alimentos, lo que supone un riesgo para la salud.
Alternativa:
- Usa agua embotellada o filtrada para cocinar.
- En caso de emergencia, utiliza métodos de purificación avanzados como ósmosis inversa o filtros de adsorción específicos para arsénico.
3. ¿Se puede usar para la higiene personal (ducharse, lavarse las manos, cepillarse los dientes)?
Depende de la concentración de arsénico en el agua.
- Ducharse y lavarse las manos: En general, el arsénico no se absorbe fácilmente a través de la piel, por lo que ducharse con agua contaminada suele ser seguro, siempre que no haya heridas abiertas. Sin embargo, en algunos casos donde la concentración de arsénico es extremadamente alta, podría causar irritación en la piel.
- Cepillarse los dientes: No es recomendable. Aunque el agua no se ingiera en grandes cantidades, pequeñas dosis pueden acumularse con el tiempo. Es mejor usar agua embotellada para este propósito.
Alternativa:
- Para ducharse, se puede usar el agua del grifo, pero si hay una alta concentración de arsénico, es mejor optar por agua filtrada.
- Para lavarse los dientes, usa agua potable segura.
![]() |
| Depuradora de arsénico |
Soluciones para eliminar el arsénico del agua
Para reducir la presencia de arsénico en el agua y hacerla segura para el consumo, existen varias opciones:
1. Métodos de tratamiento a nivel doméstico
- Ósmosis inversa: Es uno de los métodos más efectivos para eliminar el arsénico del agua potable. Filtra la mayoría de los metales pesados, microorganismos y contaminantes.
- Filtros de adsorción (óxidos de hierro o alúmina activada): Atraen y retienen las partículas de arsénico, reduciendo su concentración en el agua.
- Destilación: Este método puede eliminar el arsénico, pero es menos eficiente y consume mucha energía.
2. Medidas a nivel municipal
- Coagulación y filtración: Se agregan sustancias químicas para formar partículas grandes que luego se eliminan mediante filtración.
- Intercambio iónico: Un método utilizado para eliminar metales pesados del agua potable.
- Cambio de fuentes de agua: En algunas zonas, es posible recurrir a fuentes de agua con menor contenido de arsénico.
Conclusión
La contaminación del agua potable con arsénico es un problema serio que puede tener graves consecuencias para la salud a largo plazo. Aunque el agua contaminada no debe ingerirse ni utilizarse para cocinar o lavar alimentos, en la mayoría de los casos, puede seguir utilizándose para la higiene personal con precaución.
Lo más importante es seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, utilizar fuentes de agua seguras y, si es posible, implementar sistemas de filtración para eliminar el arsénico del agua potable.





Comentarios
Publicar un comentario